domingo, 23 de diciembre de 2007

ROCKERS Y MODS EN YOYOGUI



Este vídeo que grabé en Japón y edité hace unos meses no tiene desperdicio. Será lo último que cuelgue durante este año. Y en cualquier otro momento me dará por incluir alguna nueva sensación de los últimos tiempos. De momento estoy atrapada en las redes del amor, el desamor, la duda y las decisiones vitales. Hasta muy pronto.

martes, 6 de noviembre de 2007

NOVIO

Tuve un novio que me duró una eternidad. Cuando la eternidad por fin terminó, me quedé vacía.

MEDALLA

Cuando nació dormía más que un koala. Si el día tenía seis horas, el lustroso camaleón del ministro, tenía los ojos cerrados durante cinco horas y veintinueve minutos. He de añadir a esto, que aquí las horas duran treinta minutos de los nuestros, así que los días, si viviéramos en Morpheoburgo, se nos convertirían en el suspiro de un hada. El camaleón del ministro era el dueño y señor de este inquietante lugar, y el ministro no era más que su esclavo, pues la esclavitud era algo que se premiaba con medallas. A más esclavos, más medallas. Así el camaleón tenía una colección que no le cabía en el chalet adosado de tres plantas que le regalaron el día de su coronación. Las medallas las había transportado el ministro, una por una, a una caja de seguridad del museo del metal de Morpheoburgo. Hasta aquí todo resultaba de cierta normalidad, teniendo en cuenta que todos lo habitantes de este emporio dormían una media de cuatro a cinco horas. Al ministro, que era de los pocos insomnes del lugar, le gustaba ir a ver las pertenencias del camaleón, contar las medallas una por una, repasar el número de árboles, de flores y de zapatos de su amo, así como fijarse en posibles candidatas para su minuto de gloria, que lo era, pues cada día que el camaleón se tiraba a alguna ciudadana, la dejaba inmediatamente en estado de gracia y dulzura. Ese día el ministro volvió al chalet adosado con cierta tristeza porque la única mujer que había visto le gustaba, por primera vez en su vida, a él, y porque además, algo realmente extraño había ocurrido con las medallas: después de contarlas tres veces seguidas, se dio cuenta de que faltaba una. Faltaba, curiosamente, la medalla preferida del camaleón. Cuando este despertó a las cinco y veintinueve reclamó el desayuno, los zapatos, y una mujer, la que fuera, inmediatamente, antes de que se quedara dormido. Entonces el ministro, reverente, educado y conocedor de las manías del bicho, le dijo bajando el tono de voz que no había mujer para él, y que algún mal nacido había robado la medalla heredada de su abuelo. El camaleón entró en cólera y la primera orden que dio fue matar a todas las mujeres del reino, y la segunda no llegó a pronunciarla, se quedó dormido al minuto. El ministro fue a buscar a la mujer de la que se había enamorado y le pidió que huyera con él a otro país. Ella, un ser hermoso y dotado con las infraestructuras más elegantes del reino, con la mirada atenta en los ojos de un viejo esclavo que no valía ni para remendar su ropa interior, gritó en medio de la ciudad:
- He aquí al ladrón de la medalla de nuestro señor. Arréstenle ahora mismo, antes de que se escape.

TELÉFONO

Mariano, el chimpancé, se compró un teléfono de tercera generación para comunicarse con Tarzán. Sabía que si daba con él podría recuperar a Chita, su bisabuela, la mejor actriz de todos los tiempos. Cuando se lo vendieron los paquistanís de Lavapiés le dijeron que tuviera cuidado con el correo electrónico, consumía mucho y no era muy útil, ya que Mariano se quejaba de lo caro del dichoso móvil. Así que Mariano, a pesar de tener ese pedazo de aparato, decidió utilizarlo sólo para lo más básico. Primero llamó a la casa de su madre adoptiva que, como los chinos le estaban poniendo la cosa difícil con la adopción de niñas, se decidió por un chimpancé: nuestro querido Mariano.
Cuando marcó el número de teléfono de su casa, lo cogió su hermana pequeña, que no era china; tenía un aparato en los dientes y se la entendía fatal.
- Hermanita, soy Mariano, pásame con mamá.
- Zi, clado, ya te pazo. Odye, Madiano, ¿pod qué te comizte mi helado de té vezde?
- Mira, no me quiero gastar mucho con esto, ya te explicaré por qué. Anda, guapa, pásame a mamá.
Cuando la madre se puso al teléfono lo primero que hizo fue pegar un grito:
- Mariano, ¿cómo se te ocurre comprarte un teléfono?
- Pero mamá, tenía muchas ganas de uno, ya lo sabes. Llevo tiempo ahorrando para conseguirlo. ¡Cómo todo el mundo tiene uno!
- Hijo mío, tú no eres como todo el mundo.
- ¡Así que no te hace ilusión que me pueda comunicar contigo cuando estoy fuera de casa!
- No es eso hijito. Es que… es un poco ridículo que alguien como tú ande por la calle hablando por teléfono.
- O sea, que te avergüenzas de mí.
- No cariño, no. Es que hay cosas normales y cosas no tan normales. Y ya sabes como es la gente.
- Sabes lo que te digo, mamá, que me importa un bledo la gente.
Mariano colgó de sopetón, enfadado, y encantado con el invento. Por primera vez, cuando se enfadaba con mamá, podía mandarla a la mierda sin tener que ver luego su cara furiosa y respondona. Así que pensó que lo mejor sería atacar a mamá con el móvil cada vez que ella le atacara a él. Solo lo hizo una vez. La cabeza de su mamá se abrió en canal, igual que el móvil, y a Mariano la única opción que le quedó fue adoptar a su hermana llamándola Chita. Por supuesto de Tarzán no encontró ni el taparrabos.

GAFAS

La cigüeña no veía a más de tres metros de distancia así que el médico le sugirió que se graduara la vista. Con piel de cocodrilo y medusa disecada, los buitres de León le fabricaron su primer par de gafas, copiadas, a partir de ese momento, por otros diseñadores de gafas para aves. Cuando la cigüeña chocó con un poste de la luz, y se le electrizó hasta el bello púbico, ningún pseudo periodista, ni sabueso de revistas del corazón aviar, hizo mención a su entierro en privado, pues lo de las gafas se había convertido en tal negocio, que ahora los ecologistas solo parecían preocupados por la extinción de cocodrilos y medusas. Allá donde uno mirara, veía las carreteras celestes de las voladoras, plagadas de nubes y cientos de gafas perdidas, cayendo como por arte de magia a la tierra, lloviendo piel de cocodrilo. Entonces un edicto de la entrepierna decidió tapiar el cielo para que los hombres no se sintieran atacados por la nueva moda de los pájaros. Por lo de que caguen encima, pase, pero ya, lo de que se les caigan las gafas, y otros objetos personales de mayor envergadura… no da buen ejemplo a los influenciables renacuajos que juegan a tirar piedras a las cigüeñas, a ver si les cae un niño del cielo. Cuando la tapia se construyó, al ser transparente para dejar pasar la luz del sol, las piedras rebotaban sin dar a las cigüeñas, y los hombres, sin querer, se empezaron a apedrear unos a otros, hasta que volvieron a la prehistoria y el mundo empezó un nuevo y ya conocido ciclo, esta vez, sin aves en los cielos, para no cagarla de nuevo.

ORQUESTA

La joven efébica, alada y verdosa, llamaba con su canto a los cocodrilos, las lagartijas y a sus machos ingenuos. Ellos, dispuestos, se abalanzaban a las lianas para llegar a conquistarla y dejarse devorar por sus fauces hambrientas. Había muchos, cientos, haciendo cola, entre las ramas de los árboles; a ver a quién le tocaba antes. La amantis religiosa hembra, cantante de ópera y famosa por ser la más rápida haciendo encaje de bolillos, esperaba impaciente, escondida entre las hojas camaleónicas, su época anoréxica. Dejaba sus labores para otros ratos y entonces empezaba a trabajar para mantener la especie: uno por uno iban pasando por sus fauces, los machos verdes, contentos y maravillados, viendo como el de delante era engullido y vomitado por la cantante. Así, cuando el vómito secaba, ya tenía la cama arreglada para los pequeños, convertidos, año tras año, en orquestas de cantores.

AGOSTO

Los yonquis también se van de vacaciones en agosto, pero la heroína les persigue.

DIENTES

La abuela se saca la dentadura postiza; la lava con destreza, apoyada por un cepillo de dientes y la técnica mejorada del pasar del tiempo. Su nieto, de cuatro años, la observa recordando los dientes, en las manos, de su otra abuela. Al fin, después de un rato de tocarse los suyos, pequeños y perfectamente alinéados, comenta resignado:
- Yo no puedo sacármelos.
Enrique se va enfadado con su dentadura, buscándole las vueltas en el velo del paladar.

viernes, 2 de noviembre de 2007

TOILET

WASABI

CON EL CULO AL AIRE

FAMILY

DANCE AND DANCER



ESCRITOR

¿A medida que para el tiempo uno escribe mejor, o simplemente pasa el tiempo?

OXÍGENO

Demasiado aire para tan poco oxígeno. No puedo respirar.

John Atway

CELOS

martes, 9 de octubre de 2007

ENTRE LETRAS

¿Y tú de qué hora eres?

Unas semanas arropada por escritores de toda índole. Unas semanas en las que una se da cuenta de que en cualquier casa ponen la televisión más alto de lo debido y que la pose se da hasta en la hora de levantar el culo para tirarse un pedo. No importa. En el fondo todos somos la misma mierda. Pero ya se sabe que la mierda tiene días, colores, texturas, olores (lo de sabores no lo practico, de momento) y formas, miles de formas... Así no es lo mismo poner el micrófono a Enrique Vila-Matas para entrevistarle y quererle, como siempre, que quitárselo a Ferrér Lerín para tomarnos algo juntos sentados en un urinario. No es lo mismo escuchar a Félix de Azúa, un gran placer, que a Javier Calvo, ni mucho menos besarles antes o después del acto. Por supuesto, como todos comprenderán no es lo mismo tener sentado a unos metros a Hernán Migoya, un terrorista en potencia que decidió dedicarse a la creación, como yo, para no volverse loco, que a Care Santos, que sin quererlo y con espíritu maternal ejerce otro tipo de terrorismo, uno más permisivo, digamos, pero igual de violento... Tampoco es lo mismo hablar con Andrés Sorel, que es siempre una orgía enciclopédica, que hablar con Gamoneda, que es paisano como Migoya y un gran pastillero. Así que por favor, no se metan con los jóvenes... simplemente enséñenles para qué sirven las drogas (que como se ve muchas personas son dependientes y adictas a ellas y sin ellas no tendríamos a ilustres relevantes que saben expresar con el lenguaje algo más que diarrea verbal). Y hablando de tiburones de las letras, a Mario Muchnik le gustan jovencitas, como a casi todos los heterosexuales de su edad, y no tiene escrúpulos entre rubias o morenas, pero como abuelo que es tiene no una sino mil anécdotas que contar, de esas que bien se pueden escribir en formato "hola" de la literatura de nuestro tiempo. Se me olvidaba mencionar que no es lo mismo Mario Muchnik que Fernando Iwasaki, por muy cerca que los tengas. Iwasaki es mi primo (ambos somos sobrinos de Tanizaki) y como las familias siempre tiran para ellas y suelen poner el mismo volumen en la televisión familiar, pues para eso se han criado juntos, me gusta tenerle cerca. Hay confianza sanguínea y un tono de calor. De Mario poco más percibo; le gusta pavonearse. Con su edad y su currículum quizás yo también lo haría. Como mujer me gusta la actitud y la laboriosidad, casi japonesa, como la de Iwazaki y la mía, de Inma Turbau, intesante mujer (no entro a valorar aquí la calidad literaria de ninguno... eso me llevaría mucho más que una breve pincelada, esto es una simple mierda-mirada de cámara objetiva-subjetiva). Tampoco es lo mismo Jordi Doce que Juan Carlos Mestre, hay una alusión vital discreta entre ellos, y hay, sobre todo, por parte de Mestre una seducción en el deje que no tiene Jordi. He convivido con muchos otros... mi cámara les ha taladrado hablando sobre literatura, les ha taladrado el alma y ellos no se han dado ni cuenta (cuando uno ralentiza o acelera una imágen, un texto, una frase... tiene más puntos de vista de ese busto parlante que aparece en la pantalla): Alberto Olmos (otro al que le tira Japón lo suyo); Javier Argüello (tímido y discreto como su maestro); Marta Agudo (un manojo de nervios divertidos); Mercedes Abad (trabajadora, seguro); Luisa Castro (una exquisita defensora de la soledad enamorada); Belén Gopegui (despistada entre el canto del atardecer); Vargas-Llosa (poseído por un dandismo europeo); Esther Zarraluki (elegante en el habla, quizás la madre que me hubiera gustado tener, claro, si yo fuera un poco más joven o ella un poco más mayor); Eduardo Muga (agradabe y espeso, como el aroma del café que toman los poetas); Rafa Reig (como mi tío pero en versión cachonda, no le puedo mirar mucho rato seguido porque me da una mezcla de ternura y risa); Juan Madrid (un mujeriego pasado de moda, de la familia de los pavos, pero sin tanta pose como Vargas-Llosa, tiene la boca tan sucia como el culo y por eso me agrada, la gente finge tener la boca limpia y no enseñar el culo, lo suyo es ir de cara sin esconder la mierda... muy digno y sobresaliente en este mundo falso y narcisista en el que nos movemos); Félix Grande (un abducido por el flamenco y el amor y la poesía y la sed de vida); Aparicio-Belmonte (si hubiera vivido en el siglo doce sería un gran copista, pues tiene algo de cura solidario); Xabi Azpeitia, sensato, igual que Manuel Fernández-Cuesta, (lindos, es casi lo mismo hablar con uno que con el otro, pues los dos son editores y es como si hubieran aprendido en la misma escuela). Hay otros que he olvidado, unos sin querer, otros queriendo, qué más da, esto es solo un ejemplo de lo que se mueve entre las letras, de un pequeño grupo de insensatos que se dedican a algo que no da dinero, pero que les hace mantener el tipo en forma. El ejercicio de la defecación, que yo también practico casi a diario... para cagarme en las dichosas normas. Ya se sabe que todos, yo incluida, vosotros también, tarde o temprano, tenemos que explulsar la mierda (el dónde es casi lo de menos). Pero como bien dice Féliz de Azua: lo importante es saber de qué hora eres.

viernes, 31 de agosto de 2007

COMETA

Quería seducir al viento y a las golondrinas con su cometa, hasta que se estrelló en el ocaso.

sábado, 25 de agosto de 2007

viernes, 24 de agosto de 2007

RESGUARDADA POR LOS LIBROS

Escribir escribo, mucho, más de lo que quisiera, más de lo que uno puede imaginar: e-mails, chats, microtextos, relatos, guiones... Siento no compartirlo muy a menudo, al volverse uno cada día más exigente, le cuesta compartir aquello que no tiene la seguridad de ser realmente bueno... Entre medias de las correcciones leo, menos de lo que quisiera pero más que hace años; me divierto, suspiro y lloro con los personajes. Ahora me he enganchado a Julian Barnes, tiene un humor exquisito, ese humor contenido que en un segundo se convierte en carcajada, muy en la línea de El Guardián entre el Centeno. Después de leer El Loro de Flaubert, por recomendación de un amigo, me he comprado Talking it Over, en español Hablando del asunto (por cierto, este es otro tema que me vuelve loca, las traducciones de los títulos... una buena tesis para un nerd de la literatura, bien sure). Así es como matizaría Oliver el final de la sentencia. Oliver es el personaje más divertido de Hablando del asunto, un tipo peculiar, detestable y adorable a la vez. Lo que más me gusta de esta historia es la forma, a tres voces -Oliver, Stuart y Gillian- nada nuevo, pero le da mucha agilidad, consigue jugar con el narrador-lector, y a su vez sirve de contraste de los puntos de vista para conseguir un humor ciertamente mordaz y estupendo. Julian es aconsejable en todos sus textos. Y yo he decidido que le seguiré leyendo las tardes baldías, cuando lo último que quiero es que suene el teléfono o tener que aguantarle la charla a alguien por educación. Si puedo elegir, entonces, un libro. (Bueno, con algunas pequeñas excepciones que todavía me esperan a la vuelta de la esquina).

TIJERA

Arranqué las hojas de Crimen y Castigo con las manos y las corté en tiras alargadas con la tijera de papel. En cada tira escribí un deseo en tinta roja. Una a una las aguijoneé en los salientes de la lámpara que me ilumina mientras trabajo. Entonces, cuando la inspiración no llega, cojo una tira, la leo, y escribo sobre las palabras cortadas de Dostoievski.

DEDO

Dicen que en Cali, a finales del siglo XX, un performer francés se amputó un dedo con un hacha, en un evento público, para pedir la liberación de Ingrid Betancourt. Dicen, los que lo vieron, que ahora ese dedo permanece en el lugar donde realizó el show, el Museo Contemporáneo de Cali, sumergido en formol. Y dicen, los que olieron la sangre caliente que manaba de su herida, que el hombre quería llamar la atención de los medios para rivalizar con un semejante, también francés, que se había quedado con todos por arrancarse su propia polla a mordiscos, ante un enjambre de ovejas y de mediocres, que creían que aquello era arte. Dicen, del tipo con complejo de yakuza, que al terminar el espectáculo se desmayó delante de los jóvenes colombianos asistentes al acto, perplejos, con los ojos como platos ante lo que vivían -aunque se sabe acostumbrados a la violencia-, y que no se recuerda ni su nombre, ni su cara, ni el día de su nacimiento. Dicen que Ingrid Betacourd no es más que otra, con nombre y presencia, de los miles y millones de secuestrados en el mundo. Su queja no sirvió para nada, ni tan siquiera para llamar la atención al otro lado del Atlántico. Dicen que en París, la cuna del arte contemporáneo, los trozos del pene auto fagocitado por un reconocido artista carnicero, se han convertido en monumento nacional.

viernes, 6 de julio de 2007

ESTADIOS SUBNORMALES DE LA CLASE SINCERA

Los estadios subnormales de la clase sincera son diez:
1. idiosincrasia vulgaris del elemento visceral.
2. arrebatamiento súbito de la esencia del ser o narcisanalrealismo.
3. ingenuidad atípica del debate Rousseaniano.
4. desconocimiento lúcido del Nietzscheanismo.
5. absorción inmediata del pensamiento complejo.
6. interpretación errónea de lo cercano y lo lejano.
7. falta de adecuación a la renovación de la especie.
8. entrepiernismo múltiple o impulso masturbatorio de la ceguera.
9. desfiguración histórica por desavenimiento con el pasado.
10. incrustación grasoadiposa del eterno futuro.

Esto nos puede llevar a dos situaciones convergentes: el estereotipo y la fusión yingyang. Ambas demodé pero con gran aceptación en las clases sinceras e incinceras.

Ante toda esta complejidad sobre el personal vulgaris, de la que todos formamos parte, no me queda más remedio que tomar una decisión drástica. Sentar las bases del silencio y la cerrazón interior, impidiéndome el pensamiento en cualquiera de los tiempos habidos y por haber, disparar a la imaginación y asesinar al lenguaje por estupendo, vanidoso y volátil. Convertirme en
un subnormal de la clase sincera, un dormido. Parece una buena opción en los tiempos que corren... aunque sigo pensando que en algún lugar hay una solución para despertar en el presente.

jueves, 10 de mayo de 2007

ENTENDER, RECAPACITAR

ESTIGMAS

El tiempo, los relojes, la hipocresía, la vanidad, la mentira.


HORROR Y MIEDO

El hambre, la enfermedad, las armas, el maltrato.

sábado, 5 de mayo de 2007

SKA-PERS

Voodoo Glow Skulls, impresionantes. El miércoles 2 de mayo actuaron en Ritmo y Compás junto con los teloneros Grown at Home, unos ingleses jóvenes de gira por Europa. Assamble es el título de su nuevo disco.
Mientras tocaban y jugábamos a tirarnos mariquitas de chocolate entre un lado y otro de la sala Voodoo Glow Skulls conseguían el movimiento circular de su fanáticos ska-pers. Tribal. Energético.
Luego me comi un trozos de pelo rojo y estropajoso de Cookie, el guitarra de Grown at Home. No me gusto la gomina. Pero gane una apuesta.


VOODOO GLOW SKULLS

"Nightmares / Musical Therapy"

Submerged in a pool of someone else's control
They've taken my emotions and imprisoned my soul
Forgetting my identity I'm mechanical from head to toe
Waking up in a cold sweat and afraid of my own shadow
NIGHTMARES!!FUCKIN' NIGHTMARES!!
Another life that lives in my subconscious mind
One that's keeping me awake with the silence of the night
Visions of disorder flowing through my brain
Having to convince myself I'm not going insane
I'm living in a nightmare can't you see
I need some musical therapy

miércoles, 11 de abril de 2007

PIRÁMIDES INVERTIDAS

Todavía no existe democracia de opinión porque la parte más alta de la pirámide es la más estrecha.

domingo, 11 de marzo de 2007

COPIA ESTE LIBRO

La piratería es hija de un sistema que ha condenado al hambre cultural a la mayor parte de la población.

David Bravo Bueno. Copia este libro. Es un libro a favor de la piratería cultural, porque es necesaria, imprescindible que llegue a todos los que pueden y no pueden "económicamente" permitírsela, ya que la cultura es de lo poco que ayuda a la no alienación, a la libertad de principios e ideas, y a la no explotación económica por parte de entidades politizadas.
Este libro solo se encuentra en internet, y es de libre acceso a todos los que tengan algún mínimo interés en leerlo. Porque los soportes no tiranicen los contenidos, por una sociedad un poco más justa.

jueves, 8 de marzo de 2007

TENNESSEE WILLIAMS

Háblame como la lluvia y déjame escuchar.

LA MUJER AL PODER

El 8 de marzo no solo es un recordatorio de que la mujer trabajadora se merece que la tengan en consideración. Es mucho más profundo que todo eso. La mujer, algo que no debería ni siquiera cuestionarse, se merece como ser humano la dignidad. En esta, todavía, sociedad machista el hombre debería reconocer que sin sus madres no serían nadie. Así que una mujer además de dar vida, que es de los gestos más importantes que hacen, amamantan, cuidan, trabajan, limpian, deciden, organizan... son mucho más que un 3 en 1 y por el mismo precio. Y cualquier hombre con un mínimo de sensibilidad no solo debería darse cuenta, también debería estar orgulloso de sus mujeres y darles todo el cariño posible para que el esfuerzo de ellas se haga un poco más llevadero. Porque las mujeres son todo amor, por amor se desviven, pero dentro del amor del hombre hay mucha corrupción, cinismo, ausencias, abusos. Y sí, la mujer lo aguanta casi todo, pero la mujer no debería de hacerlo. El 8 de marzo significa que la mujer tiene que luchar por sus derechos, no dejarse avasallar, ser libre porque tiene la posibilidad de trabajar por sí misma, no dejarse explotar por sus jefes. Y sobre todo no dejarse violar, ni física ni psicológicamente.
Ojalá tanto el 8 de marzo, como el 9, el 10, el 11, el 12, y así sucesivamente, las mujeres demos un paso más en la historia de la humanidad, por nosotras, y por los millones de mujeres infravaloradas en las sociedades más retrógradas. Porque si no nos conceden lo que pedimos entonces nos pongamos en huelga. Y si esto sucediera los estados recapacitarían sobre el papel de la mujer en la sociedad.

EL HOMBRE DE UN TIEMPO

Jadeaba al mismo ritmo que corren las agujas del reloj y cuando culminó en un éxtasis eterno, todos los medidores temporales desaparecieron. De su placer nació un hombre nuevo, sin edad, sin presión, sin ataduras.

PRESENTACIÓN SEXO, COLORES Y CIANURO

Imagino que muchos todavía no conocéis el libro de relatos Sexo, colores y cianuro, en el que participo/amos varios escritores jóvenes. Se presenta en la FNAC, el viernes 16 de marzo, a las 20:00 horas, junto con otro libro de relatos. Podéis hacerme preguntas sobre el tema si queréis, pero reconozco que no estoy muy habladora. Después de una noche con 38 grados, delirando en sueños, he optado por volverme, cada día más, Bartleby. Y creo que lo estoy consiguiendo. Desde luego en la presentación hablaré, pero que no sirva de precedente. En cualquier caso pido disculpas de antemano si me diera por el mutismo. Mis compañeros, cuya incontinencia verbal cada día me asombra más, suplirán mi apatía existencialista. A los que os apetezca pasaros, a los que necesitéis reíros un rato antes de las copas del viernes, a los que resulte interesante y guste leer entre líneas mensajes indecorosos, y casi viperinos, estáis más que invitados. El mundo de las letras es así de irresistible, una vez que uno se adentra, las propias palabras te impiden salir; te engullen, y entonces... desapareces. And like that... He´s gone¡

miércoles, 28 de febrero de 2007

LA VOZ DE LA CONCIENCIA

Desde hace unos días tengo una nueva voz de la conciencia que se deja ver justo cuando abro este blog. Es cierto, lo tengo un poco abandonado, pero esa vocecita angelical me lo impide. Tiene un tono de voz cálido, pequeño y casi transparente. Es igual que un duende de orejas alargadas y mirada de pillo. Y sí, he de reconocer que se me ablanda el corazón cada vez que le escucho esa vocecita alada que me dice: no me dejes, dame de comer algo más, ahora que me había acostumbrado. Y esa simple vocecita es suficiente para que me anime a teneros al corriente de mis pequeños menesteres literarios.
De momento incluiré otro microrrelato de mi viaje a Japón, incluído en el libro de varios autores Sexo, colores y cianuro. EDAF, 2006.

DORADO

La mujer real que vive en el templo de oro imaginario que una vez hubo en un Tokio imaginario, es una japonesa rubia de ojos verdes, casi cristalinos. El reflejo de su imagen en el lago imaginario el templo es dorado, como los árboles que la iluminan todas las noches, cuando los jardines se quedan vacíos.

SÍNTOMAS DE AUTORES

Mató a su hermanita la noche de Reyes para que todos los juguetes fuesen para ella. Max Aub

lunes, 12 de febrero de 2007

UN BUEN ARRANQUE

Inicio del cuento de Julio Cortázar Las Babas del Diablo. Sublime.
LAS BABAS DEL DIABLO
"Nunca se sabrá cómo hay que contar esto, si en primera persona o en segunda, usando la tercera del plural o inventando continuamente formas que no servirán de nada. Si se pudiera decir: yo vieron subir la luna, o: nos me duele el fondo de los ojos, y sobre todo así: tú la mujer rubia eran las nubes que siguen corriendo delante de mis tus sus nuestros vuestros sus rostros. Qué diablos.
Puestos a contar, si se pudiera ir a beber un bock por ahí y que la máquina siguiera sola (porque escribo a máquina), sería la perfección. Y no es un modo de decir. La perfección, sí, porque aquí el agujero que hay que contar es también una máquina (de otra especie, una Cóntax 1.1.2) y a lo mejor puede ser que una máquina sepa más de otra máquina que yo, tú, ella -la mujer rubia- y la nubes. Pero de tonto sólo tengo la suerte, y sé que si me voy, esta Rémington se quedará petrificada sobre la mesa con ese aire de doblemente quietas, que tienen las cosas movibles cuando no se mueven. Entonces tengo que escribir. Uno de todos nosotros tiene que escribir, si es que esto va a ser contado. Mejor que sea yo que estoy muerto, que estoy menos comprometido que el resto; yo que no veo más que las nubes y puedo pensar sin distraerme, escribir sin distraerme (ahí pasa otra, con un borde gris) y acordarme sin distraerme, yo que estoy muerto (y vivo, no se trata de engañar a nadie, ya se verá cuando llegue el momento, porque de alguna manera tengo que arrancar y he empezado por esta punta, la de atrás, la del comienzo, que al fin y al cabo es la mejor de las puntas cuando se quiere contar algo)".
Julio Cortázar. Las armas secretas. Cátedra, 1999.

domingo, 11 de febrero de 2007

LA INQUIETUD Y LAS PERLAS DEL LOCO VENTURA

Al contrario de lo que pueda parecer, cada día leo y escribo más. La inquietud no me abandona, pero teniendo en cuenta que el tiempo nos resulta corto y limitado, yo he abandonado estas páginas etéreas y cibernéticas para leer a otros y escribir a ratos. Lo que si es verdad es que en esta etapa me siento un poco menos crítica y nerviosa.
Estoy leyendo Las perlas del Loco Ventura, una novela acondicionada a base de relatos cortos, llena de imaginación, destreza y seducción verbal. Es ligera y a la vez violenta, es sencilla y a la vez espiritualmente gozosa, es rápida y atómica y a la vez imperecedera y poética. Su autor Luis Artigue, leonés, como la mitad de mis genes, nos conduce por mundo de la fábula de esta tierra llena de historias que contar. Todavía no le he pedido permiso para plasmar una mínima porción de todo el contenido de su nueva novela, Premio Joven 2006 de la Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid, pero dado que ya está publicado en Edaf, Colección Voz y Tiempo, misma editorial que ya ha publicado otras novelas y libros de relatos en los que participo, y dado que pronto le pediré permiso a Luis Artigue, me atrevo a compartir con vosotros esta pincelada de autor.

INMIGRACIÓN ILEGAL DE LAS ALMAS

Esa niña ecuatoriana que vende música pirata enfrente del Palacio de Botines durante las fiestas de San Froilán no sabe nada sobre derechos de autor pero bastante de la vida. Me la encontré cierta noche arrodillada sobre una manta y casi no pude hablar con ella, pero la observé largo rato. Su sonrisa precolombina, su don de gentes, los rasgos mestizos impregnados como de humildad, ese encanto verbal que desprenden los buenos vendedores...

Entonces creí ver escritos en sus manos siglos de colonización, y una historia sobre incesto, café y fuego. Oh, gente que huyó con lo puesto, sin pasaporte, sin carné de identidad, casi sin identidad. En ese momento supuse que nadie en su país podría demostrar documentalmente que aquella niña aún no esté allí, y desde luego no hay nadie en este otro quien desee confirmar que aquí sí está; por eso ningún papel oficial puede constatar su presencia ni su existencia.

Y teniendo en cuenta que para el Estado quien no tiene papeles no existe, creí encontrarme pues no ante una persona, sino delante de un fantasma. Y no me extrañó, pues esta lenta ciudad, ya saben, está llena de apariciones que portan mensajes propicios para el desensimismamiento.

Recordé por asociación que yo tuve abuelos paternos que jamás lograron ganar una batalla; abuelos que también viajaron orientados por la brújula del hambre, y me dio por pensar por eso que, como en la realidad de la ficción la reencarnación es un hecho, tal vez esa niña envejecida por la necesidad era mi abuela.

Si, igual que quien posa flores sobre el panteón familiar, esa noche compré un CD ilegal de Víctor Jara.

Luis Artigue. Capítulo de Las perlas del Loco Ventura. Edaf. Voz y Tiempo. 2007

viernes, 2 de febrero de 2007

LA EXCITACIÓN DEL LECTOR

Las opiniones de Virginia Woolf casi siempre me parecen acertadas. Comparto esta sobre la novela, por precisa y sincera.
"Mientras leemos, ponemos cada frase, cada escena bajo la luz, pues la Naturaleza, cosa muy curiosa, parece habernos dotado de una luz interior que nos permite juzgar la integridad o la falta de integridad del novelista. O, mejor dicho, quizá la Naturaleza, en su humor más irracional, ha trazado con tinta invisible en las paredes de la mente un presentimiento que estos grandes artistas confirman; un esbozo que basta acercar al fuego del genio para que se vuelva visible. Cuando lo exponemos al fuego y lo vemos cobrar vida, exclamamos extasiados: "¡Pero si esto es lo que siempre he sentido, y sabido, y deseado!" Y uno rebosa excitación y cerrando el libro con una especie de reverencia como si fuera algo muy precioso, un refugio al que podrá recurrir mientras viva, vuelve a ponerlo en el estante, dije, tomando Guerra y paz y volviendo a ponerlo en su sitio. Si, por el contrario, estas pobres frases que escogemos y sometemos a prueba suscitan primero una reacción rápida y ávida con su brillante colorido y sus gestos vivos, pero luego se paran, como si algo detuviera su desarrollo; o si lo único que vemos es un garabateo impreciso en un rincón y un borrón en otro y nada aparece entero e intacto, suspiramos defraudados y decimos: otro fracaso. Esta novela falla en algún sitio. Y la mayoría de las novelas, naturalmente, fallan en algún sitio."

Una habitación propia. Virginia Woolf. 1929. Traducción Laura Pujol.

martes, 30 de enero de 2007

GOYAS Y BURBUJAS

Mer, Princesa Leia, sus dos colegas y yo - con la burbuja en su punto. Premios Goya. Madrid. 2007


Antonio Dechent nos guió por los pasillos del Palacio de Congresos en busca de uno de sus deseos más preciados. Lo encontramos en la sala vip donde los actores y actrices que salían a entregar y/o recibir los Goya seguían el evento por la televisión: Isabel Coixet, Ernesto Alterio, Pilar Bardem, Juan Diego, Oscar Jaenada, Elena Anaya, Najwa Nimri, Eduardo Noriega, Santiago Segura, María Adánez, Belén Rueda, Daniel Guzmán, Goya Toledo... y muchos otros de los que o no recuerdo o ni me se los nombres. Quizás puedo recordar algún escote impertinente, artificial y atrevido, y puedo recordar entre el vapor de la resaca etílica los pocos (tres) aplausos que recibió en la sala el Goya de Penélope Cruz a la mejor actriz. No hace falta que explique este último punto. Pero así es, no había mucha emotividad dentro de la sala vip, solo nervios ante el momento estelar de salir a entregar el Goya. Así que lo de Penélope a lo mejor no es tan críptico como yo lo veo. Por lo demás, la sala se empezó a llenar cada vez más, a medida que el evento se acercaba a su fin. Los comentarios, que se embarraban unos con otros y se convertían en un ruido continuado, subían de nivel. Las compañías de algunos y algunas bebían, como nosotros, para matar el tiempo, compartiendo las burbujas de la felicidad: el alcohol, pero en su justa medida. Nosotros, como no teníamos que salir a entregar ningún premio, directamente pasamos de la medida y nos aliamos a Dechent, aunque difícil seguirle el ritmo.
Caminando por los pasillos me enteré del Goya a Pepe Quetlas que quiso compartir con DDT, un bonito y justo gesto, y vi subir al estrado, una vez más, al querido Reyes Abades. La pequeña gran familia sigue agasajando los cumpleaños de los tíos y los abuelos y los mejores de lo que tenemos. Está bien celebrar cumpleaños rodeados de los que uno quiere, porqué no. A Almodovar, sin embargo, no le gustan los cumpleaños en compañía de los miembros de la Academia, comprensible, imaginando el sabor añejo de esos miembros. Pero teniendo en cuenta que lo de comer miembros se lleva cada vez menos -a mi me resulta demodé en estos tiempos que corren-, bien podría haberse saltado a la torera su manía personal y ambientado el lugar con un sabor a marca del deseo. En cualquier caso, qué más da. Lo más bonito de mi primera parte de la noche fue solidarizarme con Santiago Segura, decirle que nunca me ha gustado su cine, pero que debido a que se comportó como un caballero, decidí respetarle y quererle a partir de ese día. Nos entendimos. Espero no haberle herido, pues ya se sabe que uno está de cachondeo, con las burbujas, y puede que el otro no esté de la misma guisa y se sienta ofendido.
Al terminar la gala nos elevamos por las escaleras mecánicas a la parte de arriba del Palacio donde se degustaba comida y, algunos como nosotros, seguíamos bebiendo. Los que empezaban a beber ahora, los que de verdad se sentaron a ver la gala, aplaudieron, se rieron y se emocionaron, tenían su recompensa de casi cuatro horas de espera. Eran muchos, demasiados. No pude ni verles ni contarles. A lo más que nos acercamos fue a los Goya, les tocamos la frente, las orejas, los rizos y el belfo entristecido. Son apáticos y grises, no como los oscars que son más fálicos y luminosos. Nos hicimos fotos con las esculturas, con sus nuevos dueños, con los camareros, con la Princesa Leia, con las chicas yeye de rizos de peluquería, con el presentador de la gala, con todo el que se dejó y nosotros quisimos. Hasta que por fin dedimos salir pitando a la fiesta privada de Salvador, conduciendo con burbujas, en busca de Dechent, riendo con ganas y terminando la noche haciendo eses. Daniel Brühl aguantó mis comentarios sobre el guión en el que ando, con mucha educación y amabilidad. Se lo agradezco. Yo, al contrario, no estoy segura de haber aguantado alguien tan impertinente como yo con varias copas de más.
Los Goya estuvieron mucho mejor organizados que en pasadas ediciones y yo me lo pasé mejor que otros años. Así que, a parte de los premios, que no voy a entrar en cuestionar, y que me han parecido bastante justos, los premiados también fuimos nosotros.
¿Qué es el cine? ¿Y tú me lo preguntas? El cine son los premios Goya. Y a mi me gusta celebrar el evento con burbujas, es cuestión de alimentar la lorza, que pide mucho ultimamente. Lo demás es especulación, entre medias subvenciones, y al final distribución y mil pequeñas cosas más, feas de contar, casi secretismo de profesión. Pero cuando la cosa sale bien, con una buena historia de base, que delicia ¿verdad? Igual que cuando a uno le toca la lotería.

domingo, 21 de enero de 2007

DUENDE FLAMENCO


Las Carboneras. Flamenco dancers. January, 2007


Se muy poco de flamenco. La primera vez que vi una actuación en directo tenía dieciseis años y no me gustó. La segunda, tuve la sensación de que en ese arte maldito había algo más. A partir de la tercera vez, no me pude desenganchar. Hay algo que tiene el flamenco, ese duende del que hablan los gitanos, que se te mete dentro, tan dentro que te agarra la tráquea, se cuela por los pulmones, el corazón, el estómago, el intestino y se hace con tu alma. Tú no lo puedes remediar.
El jueves dieciocho de enero fuimos con Bernard Hill a Las Carboneras. A él le apasiona el flamenco y tiene una gran colección de discos. Ese día pudimos ver a las bailaoras Manuela Vega, La Tacha y Olga Pericet, acompañadas del guitarrista Juan Soto y los cantaores Ángel Gabarre y El Kanku. El invitado estrella era El Titi. No distingo entre soleá, seguirilla, fandango, malagueña, taranto, fandanguillo, martinete y otros cuantos palos más que proceden todos de las tonás, pero como toda historia musical que se precie, los ritmos, sonidos, cantes y bailes evolucionaron creando así un movimiento artístico de gran riqueza. Aunque no soy una entendida en materia, y a Bernard le pareció algo bastante enfocado a turistas, confieso que lloré de la emocion. Confieso que el duende se apoderó de mi durante unos minutos, y que con ese duende viajé por un espacio rítmico a la estratosfera, y que al bajar, algo dentro de mi había cambiado.

NOVELAS Y GUIONES

Celebro el final de mi primera novela corta terminada. Hay otras que de momento no he concluído. La emoción y el efecto internos son muy parecidos a cuando terminas un guión, solo que con éste asumes que el trabajo no es más que el princpio de una ardua lucha para llegar a contemplar tu historia en una gran pantalla, si es que tiene la posiblidad de llegar a pasar. Con el remate de una versión de novela, por mala que sea (también hay guiones malos, muchos, demasiados y algunos maravillosos), te sientes más realizado, porque lo lea alguien o no, tú mismo sabes que es un trabajo completo. Este es uno de los motivos por los que a los guiones no se les quiere dar categoría de obra literaria, porque están en continuo proceso de cambio, desde su primera escritura hasta la fase de la posproducción de la película. Es un buen ejercicio practicar estas dos formas de entender la ficción, que en esencia vienen a ser lo mismo. Lo único, saber de anteamno, que las novelas son mucho más agradecidas que los guiones, por unos cuantos motivos.

miércoles, 17 de enero de 2007

TÉCNICAS DE LIMPIEZA PERSONAL

Zen Garden. Kyoto. Japan. October, 2006

1. Dormir todas la horas que te pida el cuerpo.
2. Comer sano, beber agua y practicar un deporte que te guste.
3. Si el trabajo te deprime, déjalo.
4. Alejarte de la personas que te den mal rollo o te provoquen estrés. El mundo está lleno de gente maravillosa. Cuando alguien se va, alguien llega.
5. Dejar de fumar. A medio plazo te limpia por dentro y por fuera.
6. El dinero no es lo importante, sino el tiempo que puedas dedicarte a ti mismo.
7. Meditar vaciando tu mente de tensiones.
8. Limpiar el espacio personal.
9. Controlar tu salud con oligoelementos o productos totalmente naturales, con el asesoramiento de alguien que esté formado en la materia.
10. Evitar las medicinas con compuestos químicos, te curan unas cosas, te estropean otras.
11. Leer buenos libros, escuchar buena música y ver las películas que te apetezca. Mejor si te aportan algo.
12. Quedar con la gente que quieres y hace tiempo que no ves.
13. Reconciliarte con las personas de tu familia que creas importantes en tu vida, no por ellos, sino por ti.
14. Escribir tus problemas para que se desvanezcan.
15. No alterarse por las presiones. Hay personas que creen que los demás tienen que compartir sus problemas y su malestar.
16. No dejarse violar ni física, ni mental, ni intelectualmente. Las personas tenemos nuestros propios criterios vitales y nadie que se precie debe obligarnos a modificarlos.
17. No actuar con egoísmo, vanidad, ni por dinero. A la larga puedes ser rico, tener éxito, pero en el fondo no serás más que una persona sola, incomprendida y sin amistades verdaderas.

Seguro que hay muchas más. Estas son las que llevo tiempo practicando y me funcionan, hasta que no se demuestre lo contrario. Seguro que muchos conocéis alguna que hayáis practicado, que no esté en la lista, y que sea una buena técnica de limpieza.


viernes, 12 de enero de 2007

PORQUE LE DA LA GHANA

De pequeña coleccionaba piedras de colores con sus amigas de Ghana. Rocío volvió a Europa y viajó por en mundo buscando la mejor forma de realizarse. Y la encontró de nuevo en Ghana poniendo gran parte de su empeño en KWAABUETE COMMUNITY CULTURAL CENTER, en apoyo de sus amigas y sus amigos de la infancia, y los hijos de éstos, y todos los demás. Y lo hizo porque le dió la Ghana. Si te da la Ghana tú también puedes apoyar este proyecto.

http://dalaghana.blogspot.com


Rocío y Twiggy, un día de resaca.

viernes, 5 de enero de 2007

OTRO LIBRO EN BLANCO

Palideció. Sus manos valoraban el peso del libro. Escaso para mantener algo realmente interesante. Lo abrió tembloroso mientras el sol le ensordecía su mirada. Tenía las pupilas dilatadas igual que el alma. No quería encontrarse con un poema. Estaba cansado de los poemas y de los poetas. Malditos seres aburridos. El hastío le recorría las venas, agotado, tratando durante años de encontrar algo que realmente le sedujera. No había forma de libro, portada, textura, calidad y cantidad que en sí mismas le dijeran: esto es tu obra de arte. Por unos motivos u otros la esencia de lo que él denominaba la perfección no existía.

Abrió el libro por su única página. La textura y el grosor de la página no eran normales. Y lo más extraño de todo: dentro no había nada, absolutamente nada escrito. En uno de los lados encontró un pequeño relieve con una flecha negra pintada. Observó la flecha tratando de descifrar el significado. Así estuvo durante unas horas en el parque después de comprar el libro, caminando hacia su casa por las calles desiertas, en su casa vacía. Él había devorado todo cuando poseía de material: las sillas, las mesas, los electrodomésticos, los elementos tecnológicos. Todo menos los libros, maniáticamente ordenados. Paseó por su casa rascándose la cabeza con el nuevo libro en las manos. Lo compró en una librería pequeña. El chico que se lo vendió era tan misterioso como el libro. Pensó que sin que él se diera cuenta, trató de decirle algo con la mirada. Tampoco pudo entenderlo ni antes ni después pues seguía nervioso, de un lado para otro, pensado en qué contendría realmente ese libro. Enfadado lo tiró al suelo. Con el impacto la flecha se presionó y la hoja en blanco se convirtió en un águila.
Ahora el hombre sí que palideció. Tanto que se fundió con las paredes impolutas de su casa vacía. Y mientras observaba camuflado entre la pintura blanca de su espacio a ese ave rapaz se dejó llevar por la belleza más absoluta. Las tapas del libro se convirtieron en las alas que el águila desplegó con firmeza. A cámara lenta. El ave le observó y le ignoró a la misma vez. Desplegó su vuelo flamante y directo alrededor de la casa y finalmente voló con precisión hacia el hombre. Él calló, aturdido, entusiasmado, deleitándose con el maravilloso contenido de ese libro, esa obra más allá del arte, que se le clavó en el corazón. Cuando el vendedor de libros fue a reclamarle la venta de ese libro por una extraña confusión, lo único que encontró en la casa vacía fue una mancha roja en la pared y una pluma. Ni rastro del hombre, ni rastro del águila, ni rastro del libro. El librero cogió la pluma y salió sin miramientos por donde había entrado.

SEGURAMENTE NO

Te veo y te observo en silencio, de lejos. Pienso en ti en secreto. No puedo penetrar en tu espacio porque lo desconozco y el mio es demasiado complicado como para ofrecértelo. Te hablo y mi edad se difumina, mi voz se derrite. Nuestros ojos se encuentran en un espacio denso y prometedor. Posiblemente sea algo pasajero, como pasa a menudo con otros espíritus, que los presientes, te topas con ellos, compartes espacios cercanos y energías similares, pero pronto te alejas y olvidas. Seguramente no: es mucho más interesante que una ilusión pasajera.

martes, 2 de enero de 2007

TRES MUJERES LIBRES

Alice, Sara y yo. Nuestros padres no nos merecen. Hemos crecido fuertes y reivindicamos libertad. Les obviamos como algo casual y queremos estar lejos de sus sombras. Ahora ya podemos, pero hasta hace poco nos obligaban a convivir con ellos. Estos padres biológicos son los seres más vergonzantes de nuestra existencia. Las tres lo sabemos. Por eso somos almas solitarias que nos comunicamos sin palabras y cuando alguien nos pregunta por esos alienígenas contestamos mirando hacia delante.

IF I WERE A DOG...


PIM-LIKO, Harajuku, Tokyo, Japan.